Estimados Inversores,
Quiero darles las gracias en nombre del equipo de Midas Investment Group, por su confianza a lo largo de estos años y hacerles llegar nuestros mejores deseos en esta navidad y un próspero 2019. En vista de la actual volatilidad y caída de los mercados bursátiles quisiera compartirles nuestra visión.
Comienzo parafraseando una analogía de Ralph Wanger director de Acorn Funds, quien compara la evolución del mercado de acciones con un individuo que va de un punto a otro con un perro bastante inquieto atado a una larga correa; el perro se va lanzando en cualquier dirección, mientras que el individuo va a un paso constante. Si bien no podríamos anticipar la dirección y velocidad que tomará el perro, si podemos proyectar que su propietario se dirige del punto A al punto B a una media de 8Km/h. Como se imaginarán el individuo representa el crecimiento del mercado a largo plazo mientras que el perro las fluctuaciones de corto plazo, y aunque nuestra principal atención se enfoca en las perspectivas de largo plazo, estas oscilaciones aleatorias y especulativas permiten oportunidades de inversión.
Si tenemos un plan de inversión de una década o más, ¿no es una buena noticia las fluctuaciones a la baja del mercado? En general los inversores se contentan cuando sus valores cotizan al alza, aunque esto se traduzca en pagar una prima más alta a la reinversión y para nuevas inversiones, además de unas menores expectativas de crecimiento del capital a largo plazo. Mientras que, durante un mercado bajista, aunque se reduce el valor de la cartera es compensado con el incremento de las expectativas de los rendimientos. Como dice el exitoso inversor Warren Buffett: “Si pensamos comer hamburguesas toda la vida, ¿preferimos que los precios suban o bajen?”.
Es fácil pensar en por qué no esperar exclusivamente los momentos de grandes descuentos para entrar al mercado, la razón es que los mismos son impredecibles y en palabras de Bernard Baruch “no intente comprar en los mínimos y vender en los máximos, sólo los mentirosos pueden hacerlo”. Así que quienes intentan el timing perfecto generalmente terminan perdiendo el crecimiento y dividendos que se dan durante dicha espera.
A nuestro juicio las recientes valoraciones máximas para El Standard & Poor’s 500 reflejaban una proyección de crecimiento en su cotización de 5,5% anual a largo plazo. La actual caída representa una oportunidad de mejor expectativa de rentabilidad a largo plazo, la cual estimamos en 8% anual, mejorando así las perspectivas de retorno a largo plazo. Adicionalmente cabe resaltar que alrededor ⅕ de nuestras carteras se encontraba en el mercado de acciones al momento del ajuste, lo que nos ha permitido rebalancear los portafolios, vendiendo activos que se han visto menos afectados y con menores proyecciones de crecimiento y reasignar los fondos a otras empresas que presentan mayores descuentos con mejores estimaciones de sus tasas de crecimiento en el mediano plazo.
La útil regla de 72 nos dice que: con 5,5% de rentabilidad el capital se duplicará cada 13 años, mientras que con una tasa de 8% los mismos se duplicarían cada 9 años.
Nuestro enfoque es de conseguir empresas que consideremos subvaloradas o incluso en su justo precio, con buenas expectativas de crecimiento de sus beneficios y dividendos. Estamos convencidos de que el mercado siempre vuelve a reflejar su valor razonable, a sabiendas que durante el camino se mostrarán anomalías.
Finalizo esta carta con un extracto de un poema de Rudyard Kipling:
“Si puedes mantener la cabeza cuando todos pierden la suya
Si puedes confiar en ti mismo cuando todos dudan de ti
Si puedes esperar sin cansarte en la espera
Tuya es la tierra y todo lo que hay en ella“
Me despido deseándoles nuevamente una Feliz Navidad y un Próspero 2019
Jesus Delascio
Midas Family Office
Diciembre 2018