Ante la incertidumbre del alcance del Coronavirus y sus efectos en la economía mundial los mercados han ajustado fuertemente en sus cotizaciones durante las últimas semanas, a lo que recientemente se suma el desplome de los precios del petróleo como consecuencia de la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita. Todo esto luego de un ciclo expansivo de más de una década en la economía y los mercados bursátiles de EUA y en un entorno de tasas de interés bajas, en donde los espacios para bajarlas y hacerle frente a un escenario de desaceleración es limitado.
El Standard & Poor’s 500 al día de ayer descendió 7,60% para un descenso acumulado de -15% en lo que va de año y -19% desde su punto máximo.
Dicho esto, queremos resaltar que nuestras expectativas para el mediano y largo plazo no han cambiado durante el último par de semanas. Nuestras proyecciones para el crecimiento de la economía global y para las empresas en donde tenemos participaciones se mantienen iguales, y aunque sabemos que nos tropezaremos con algunos baches en el camino no creemos que cambie significativamente nuestras proyecciones para la próxima década. Por ende, menores cotizaciones representan mejores oportunidades para comprar, indistintamente a donde vaya el mercado en el corto plazo.
«No creo que nadie sepa qué va a hacer el mercado. Creo que tú… sabes si estás haciendo una compra inteligente a un precio determinado.»
Warren Buffett
Para quien esta construyendo un edificio si los precios del cemento bajan, es una buena noticia. En nuestro caso, construimos una cartera de inversiones con empresas que consideramos tendrán un buen desempeño a largo plazo; mientras más baratas estén es mejor.
Otra ventaja de las bajas cotizaciones es que muchas de las empresas en donde tenemos participaciones tienen programas de recompra de acciones, que se harían mas eficiente ante los descuentos actuales.
Sin embargo uno de los riesgos que representa la volatilidad para los inversores son los retiros de capital durante periodos desfavorables en tanto a las cotizaciones. Como indica Burton Malkiel:
«El riesgo real de la inversión en acciones y bonos depende del tiempo que mantenga la inversión»
Las acciones como alternativa de inversión tienen sentido solo si pueden mantenerse a largo plazo, los requerimientos de capital anticipados representan una amenaza para el inversor.